Sin embargo, la cafetera salió con más brio e intensidad y acechó la meta de Kawashima, pero los nipones, lejos de amilanarse, sacó sus garras y Okubo, en un disparo a la media vuelta dentro del área, probó por primera vez a la defensa colombiana, que taponó su disparo.

Cuando Japón parecía estar más a gusto sobre el terreno de juego llegaría el penalti de Konno, que zancallideaba a Adrián Ramos y Cuadrado, con un zambombazo al centro de la portería, ponía por delante a los sudamericanos. El partido seguía con un toma y daca constante, y cuando los colombianos ya pensaban en el descanso, Okazaki remataba un centro servido desde la derecha para marcharse a los vestuarios con un empate que les mantenía con la esperanza de octavos.

En la segunda mitad, Colombia volvió a salir más enchufado que Japón, y fruto de ello llegaría el segundo tanto de la cafetera. Primero avisó Carbonero con un remate alto dentro del área tras el lanzamiento de una falta lateral, y en el 55', en una jugada preciosa de la línea atacante, Jackson Martínez batía a Kawashima para hacer el segundo y dejar a Japón muy tocada.

Tras el gol de Colombia, los asiáticos volvieron a la carga y en dos minutos tuvieron dos ocasiones claras para hacer el empate, pero el disparo de Kagawa y un centro de Nagamoto que no encontró rematador, evitaron las opciones japonesas. En el 77', de nuevo Nagatomo probaba a Ospina en un disparo raso que atrapó bien el colombiano, y cuando Japón buscaba de forma desesperada el tanto del empate, una nueva contra fulminante de Colombia la aprovechaba Jackson para hacer su doblete en el primer partido como titular.

El golazo de la noche lo puso James Rodríguez en las postrimerías del encuentro. Con asistencia de Jackson Martínez, dribló una vez, dribló otra vez, dejó en el suelo a su marcador y picó la pelota para hacer el 1-4 definitivo. Japón eliminada y Colombia ya piensa en su próximo rival, Uruguay.